Carlos Pimiento Serrano (Bucaramanga, 1989)
Carlos Ulloa Rivero (Bucaramanga, 1987)
El Laboratorio Creativo de Santander–LACSA es una asociación sin ánimo de lucro creada en el año 2020 por cinco gestores y artistas de Bucaramanga. Su objetivo es incentivar y fortalecer procesos de creación, circulación y gestión independiente y colaborativa en el área de la cultura. A la fecha, el equipo de LACSA ha liderado o participado en más de cuarenta proyectos y producciones de distinta índole, entre las que se incluyen proyectos editoriales, exposiciones artísticas, conciertos, realizaciones audiovisuales, conversatorios y talleres tales como la feria de editoriales independientes Voces Feroces, el festival Euforia, el festival Auroras entre otros. Cuenta con un brazo editorial con 7 trabajos impresos a la fecha.
El camino de la cabra. Farmacopea cromática
del Chicamocha.
Exposición de fotografía
Centro Colombo Americano
21 de noviembre al 05 de diciembre 2025
Hace tres años la
vocación del fotógrafo santandereano Carlos Pimiento Serrano por documentar el
cañón del Chicamocha se vio interrumpida por una crisis emocional que terminó
en el diagnóstico de un trastorno de bipolaridad. En el duelo por aceptar esta nueva
realidad y por batallar con los efectos secundarios de las drogas
psiquiátricas, Pimiento decide cambiar su enfoque documental por uno más
artístico: abandona la fotografía digital, y comienza a fotografiar y
experimentar con películas de 35 mm a color. Con el pasar de los años, las
experimentaciones con rollos forzados o vencidos, las intervenciones con
químicos y la impresión sobre superficies artesanales, se transformaron en
fármacos no convencionales, en una “farmacopea cromática” que le permitió a
Carlos llegar hasta la aceptación de su nueva realidad, una en donde la idea de
soltar el control y la resiliencia ante el fracaso debían ser puntos cruciales.
La fotografía documental dio paso a la exploración artística en medio de la
soledad, la aridez y la majestuosidad del cañón. Esta exposición se suma a la
memoria cultural que tenemos de este rasgo geográfico tan nuestro, visto ahora
como un camino hacia la aceptación y la calma, oscilando a cada paso con la
recaída y los prejuicios sociales que acompañan a los diagnósticos
psiquiátricos, paradójicamente cada vez más esparcidos en la población joven de
nuestra ciudad. Se trata de una cura a través del color, y de aprender a
abrirse paso por entre abismos, como las cabras.



